Recientemente, recibimos la consulta de un comprador de una carpintería que buscaba filtros “a prueba de fuego, o ignífugos” para su colector de polvo. Era su primera vez haciendo un pedido para los colectores de su empresa, y un proveedor le había recomendado que buscara “material ignífugo, como Nomex” (es decir, aramida). Como era de esperar, se sorprendió cuando le explicamos que tal cosa no existe, y que su supuesto “experto en filtros” le había dado un consejo potencialmente desastroso.
📖 Lee también: Introducción a las explosiones por polvo combustible en colectores de polvo
Riesgos de incendio y explosión en un sistema de colección de polvo
El riesgo más grave para un sistema de recolección de polvo (y para la planta que lo utiliza) es un incendio o explosión causado por polvo combustible. Materiales como harina, madera, hierro, aluminio, azúcar y muchos otros se vuelven extremadamente combustibles cuando se encuentran en forma de polvo. Además del riesgo de incendio, el polvo combustible dentro de un colector encuentra el ambiente perfecto —oxígeno, dispersión y confinamiento— para explotar con gran fuerza.
¿Existen los materiales para alta temperatura y terminación resistente al fuego?
Incluso si el polvo en cuestión no es lo suficientemente combustible como para explotar o mantener una llama, aun así las chispas y brasas pueden dañar los filtros del colector. Aunque una chispa no logre encender el polvo, puede prender fuego directamente a los filtros.
Las aplicaciones generales del filtro de aramida incluye entornos con polvo altamente abrasivo y procesos químicos a altas temperaturas.
Los filtros de aramida (marca comercial Nomex) son ampliamente utilizados por su resistencia relativa a altas temperaturas y a la abrasión. La mayoría de los filtros de colectores están fabricados con materiales sintéticos como poliéster, polipropileno, aramida o fibra de vidrio. Aunque algunas telas como la aramida o la fibra de vidrio soportan temperaturas más altas, NO son ignífugas. El dato de temperatura solo indica su resistencia al calor del gas de proceso, no al contacto directo con una llama o chispa. Si una brasa caliente toca estas telas, puede derretirlas, perforarlas o incluso prenderlas fuego.
Algunos fabricantes ofrecen recubrimientos “resistentes al fuego” o “retardantes de llama” para distintos medios filtrantes. Estos tratamientos pueden ofrecer protección adicional, pero no evitan totalmente el daño si una brasa entra en contacto con el filtro.
📖 Lee aquí nuestro Estudio de caso – Seguridad ante polvo combustible en la industria aeroespacial
Prevención vs. protección contra incendios y explosiones
Para proteger tu sistema, existen dos tipos de soluciones: prevención y protección.
Algunos dispositivos de prevención incluyen:
- 🔶 Arrestadores de chispas: rompen brasas en fragmentos pequeños para extinguirlas antes de que lleguen al colector.
Explosion isolation valve connected to ductwork outside the facilities
- 🔶 Válvulas desviadoras o compuertas de emergencia: redirigen el flujo de aire cuando se detecta una chispa o fuente de ignición.
- 🔶 Mecanismos para controlar la ignición: inyectan gases o polvos inertes para reducir el riesgo de ignición en procesos de alto riesgo.
.
Algunos dispositivos de protección incluyen:
- 🔹 Paneles de explosión (también conocidos como válvulas de alivio): liberan presión de forma segura ante una explosión.
Nuevas válvulas de alivio para explosiones
- 🔹 Sistemas de supresión de incendios: como rociadores de alta velocidad o inyección de productos químicos secos que apagan fuegos rápidamente.
Tanto los sistemas de prevención como los de protección son esenciales para evitar que un incendio en los ductos llegue al colector de polvo.
⚠️ Para cumplir con las normas de seguridad (OSHA, NFPA), normalmente se requiere una combinación de ambos. Solo integrando adecuadamente ambas estrategias se puede mitigar el riesgo asociado al polvo combustible.
📎 Ver más: Accesorios para polvo combustible
Conclusión — ¿Filtros a prueba de fuego? No te dejes engañar
No existe tal cosa como un filtro a prueba de fuego. Desconfiá de quien te ofrezca algo así: o está mal informado, o te está engañando.
Las instalaciones que enfrentan riesgos importantes por polvo combustible deben consultar a un proveedor con experiencia en colectores de polvo o a un experto en seguridad contra incendios para desarrollar una estrategia completa. Incluso si tu proceso no maneja polvo combustible, una chispa puede prender fuego tu colector. Puede que tu sistema no explote, pero tus filtros sí pueden incendiarse… y lo harán, si no tomás las precauciones necesarias.